LECTURA: ISAÍAS 53:2b-4 (NVI)
2 No había en él belleza ni majestad alguna; su aspecto no era atractivo y nada en su apariencia lo hacía deseable. 3 Despreciado y rechazado por los hombres, varón de dolores, hecho para el sufrimiento. Todos evitaban mirarlo; fue despreciado, y no lo estimamos.4 Ciertamente él cargó con nuestras enfermedades y soportó nuestros dolores…
El Dios Ilegal
Jesús de Nazaret fue ilegal eso lo llevó a la cruz. Ese hecho justificó su sentencia ante las élites judías de Jerusalén y su muerte ante el sistema penal romano. Alguien ha dicho que Jesús de Nazaret fue el primer “anti-cristo” del judaísmo por que no llenó las expectativas del mesianismo davídico esperado por los gobernantes judíos y usurpó históricamente el nombre “mesías”; hoy lo conocemos con el nombre Jesucristo. También se puede decir que Jesús de Nazaret ha sido el más grande “anti-cesar” porque sus seguidores se refirieron a él con el apelativo “kyrios” o “Señor Jesucristo” desafiando el señorío del Cesar y enfrentando el martirio por ello gozosamente. Así Jesús puede ser considerado el Dios anti-ley o “ilegal” de su tiempo.
Teológicamente hablando esto no significa que Dios es anti-leyes humanas. Lo que significa es que hay leyes humanas que son anti-Dios. En estos casos el Dios creador de los cielos y la tierra hace sus apariciones históricas (encarnación) por medios antagónicos y aparentemente ordinarios que interrumpen las leyes injustas. La pregunta de Natanael aquí es clave para entender este fenómeno: “¡De Nazaret! —replicó Natanael—. ¿Acaso de allí puede salir algo bueno?” (Jn 1:46). Ya el escritor de Isaías 53 desde su experiencia de exilio lo anticipó en el texto de arriba. El mesías de Dios sería alguien socioculturalmente indeseable, ordinario, despreciable y desechable.
Yo creo que si el Hijo de Dios decidiera encarnarse hoy en Los Estados Unidos de América sería de plano un inmigrante indocumentado cruzando la frontera para predicar las buenas nuevas en nuestro país. Quizás eso es lo que está ocurriendo y no nos hemos dado cuenta. Ojalá y no estemos cometiendo el mismo error de hace dos mil años limitándonos a ver a l@s inmigrantes como individuos indeseables, ordinarios, despreciables y desechables. Les propongo nuevos ojos para ver al inmigrante a la luz del evangelio de Mateo 25:38 “fui inmigrante y me acogieron”.
Culmino con un conocido poema titulado “el Dios ilegal” del escritor Luis Cruz Villalobos dedicado a los millones de indocumentad@s:
Como todos sabrán
Nuestro Dios justo y amoroso
Es extranjero
En el planetario sentido de la palabra.
Una vez le pidieron sus documentos
Y la policía no quedó satisfecha
Además su acento
Su tono de piel
Su aire sospechoso
Todo indicaba que tenía que irse
Ni para turista le daba la medida.
Lo tomaron de la solapa
Le registraron hasta los calzoncillos
Y lo dejaron en la frontera
Y así humillado
Partió Dios a buscar otro lugar
Pero la historia se repitió.
Este ilegal de …
Qué hace aquí
Vino a robarnos
A ocupar nuestros trabajos
Que se vaya el …
Y de frontera en frontera
El Dios único
Creador de la tierra y sus mares
Indocumentado
Partía a buscar un hogar
Pero nada
Era extranjero en todas partes.
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Rev. Oscar García-Johnson, PhD
Facultad del Seminario Teológico Fuller
Miembro de “Comunidad Sin Fronteras”, Glendale, CA.
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Los Ángeles, CA, USA
